
¿Existe una antropología cristiana? Aparentemente no. La antropología que brota del Evangelio tiene que adaptarse y ser compatible con todas las concepciones del hombre de las distintas culturas, los distintos lugares… porque la Iglesia es Católica universal y debe inculturarse. Sin embargo, hay unos principios que hacen comprensible la relación entre el ser humano y Dios y que son irrenunciables. El hombre es una criatura llamada a la comunión con Dios, cuya relación está marcada por la experiencia del pecado y la experiencia de la gracia. Hasta que al final de la historia entra en una comunión plena con el Dios que lo llamó a compartir con Él la existencia.